La ruta de las misiones en Sinaloa
Sinaloa fue uno de los primeros territorios explorados por la Orden De la Compañía de Jesús, una de las tantas misiones jesuitas que se internaron en nuestro país con el fin de evangelizar y difundir la fe en el siglo XVI.
En este estado podemos encontrar, aún hoy en día, vestigios del mundo misional jesuita, sin el cual muchos de los poblados del noroeste de México no existirían. Puedes comenzar esta ruta en el municipio de San Ignacio, cercano al río Piaxtla en donde los misioneros jesuitas se asentaron dando a conocer su doctrina a sus pobladores, construyeron edificaciones y ayudaron a conformar la cultura y actividades religiosas que hoy son parte de Sinaloa.
San Javier
Este tranquilo poblado lleno de casonas con grandes tejados y calles empinadas aún conserva tradiciones de aquellos misioneros, como La Taspana, celebrada el tercer domingo de octubre desde 1865 o el Testamento de Judas de San Javier, una tradición con más de 100 años de antigüedad.
Leyva
Una de las ciudades más pintorescas del estado llena de casas del siglo XIX es Leyva, lugar en donde se inició la gesta de los jesuitas con la llegada de los padres Gonzalo de Tapia y Martín Pérez.
Guasave
Las misiones asentadas en este lugar cumplían funciones educativas y económicas, además de fomentar la agricultura y la expansión de hortalizas. Podrás encontrar algunos vestigios jesuitas en el municipio de Nío, como su templo con arquitectura del siglo XIX donde encontrarás la imagen de San Ignacio de Loyola, que envuelto en múltiples leyendas, se ha convertido en un signo de ocupación jesuita.
Fuente: Mazatlán Interactivo