Salud

Parto en agua, lo que hay que saber

Parto en agua, lo que hay que  saber
  • Publicado6 noviembre, 2014

Esta manera de recibir un nuevo ser es muy antigua, a pesar de que ha evolucionado, con el tiempo ha perdido fuerza frente a las nuevas formas de parto.

Sin embargo en la búsqueda de regresar a lo natural, el ser humano retoma sus raíces y desde hace 50 años resurgió y se redescubrieron los beneficios esta manera de dar a luz.

En entrevista Gabriela Zebadua Baqueiro, partera e instructora en Psicoprofilaxis y especialista en parto en agua, nos menciona que un parto respetado es aquel en que la madre y el padre, con base en la información que reciben, pueden responsablemente elegir la forma en que quieren que sus hijos nazcan; cuentan con el apoyo de profesionales y centros asistenciales que consideran y resuelven sus necesidades individuales.

La mujer tiene el cuerpo diseñado para dar a luz de manera natural, sin la intervención de procedimientos quirúrgicos. Ella, debe confiar en su cuerpo, en la sabiduría que le da su instinto y la capacidad para dar vida, subrayó Gabriela Zebadúa Baqueiro, Directora de la Clínica Mi Parto en Agua.

El parto en agua es una de las formas del parto respetado y en países occidentales como como Francia, Holanda, Rusia, España, Inglaterra y Estados Unidos, es algo muy común. En México se lleva a la práctica desde hace 20 años.

¿De qué trata el parto en agua?

Como su nombre lo dice: es parir en agua. El procedimiento se lleva a cabo en una tina amplia con agua a temperatura corporal, es decir entre 36 y 37 grados centígrados. Cuando la madre está en labor de parto y en un punto de dilatación de entre 3 y 5 centímetros se introduce a la tina; el agua caliente acelera el procedimiento y relaja los músculos para hacer más pronta la expulsión.

Beneficios

El agua caliente beneficia a la mamá; al ser un analgésico natural ayuda a la distensión muscular del periné lo que evita desgarros y facilita el trabajo de alumbramiento, además reduce la producción de adrenalina, y permite la producción de endorfinas, sustancias que disminuyen la sensación del dolor.

Para los bebés, salir y encontrarse en agua es menos traumático, ya que el líquido es un medio conocido para ellos. Además,  al encontrarse en un medio que guarda su temperatura corporal, el recién nacido no pierde tanto calor como en los partos tradicionales.

Y lo más importante, favorece el contacto piel con piel entre la madre y su hijo en un entorno más íntimo que en la sala de partos de un hospital.

Restricciones de quién puede o no tener un parto en agua

Este procedimiento es factible en casi 85 por ciento de las mujeres. Sólo se restringe en casos de embarazos de alto riesgo, que el bebé venga en mala posición o que la mamá padezca de algún trastorno como presión alta o diabetes. Esto lo determinará tu ginecólogo. Incluso si tu anterior parto fue mediante cesárea, podrás elegir dar a luz en el agua esta vez.

¿Qué preparación emocional y física se necesita para dar a luz en agua?

Gabriela Zebadúa destaca que es muy necesario prepararse antes de partir, por lo que debe entrenarse con un curso psicoprofiláctico a partir de los 4 meses de gestación; la preparación incluye la práctica diaria de ejercicios de acondicionamiento físico que te den el tono muscular y elasticidad necesarias, así como aprender posturas, técnicas de relajación y respiración para el alumbramiento.

Pero si esta opción te atrae y ya tienes un embarazo adelantado, puedes tomar cursos exprés que te ayudarán a llevar a cabo tu alumbramiento sin problemas.

También es bueno recalcar que la estabilidad emocional de la madre es sumamente necesaria, debes preguntar a tu partera que sucede si eres madre soltera o no tienes el apoyo emocional necesario, ya que esto puede ser una contraindicación.

El parto en agua otorga un papel principal a la madre en la culminación del embarazo. Es una experiencia única que termina de manera menos dolorosa y que puede ser tremendamente disfrutable. Hace mágico el momento de conocer a tu hijo.

Como mamá es una opción para salir de las maneras clásicas y recibir amorosamente a tu milagro.

Agradecemos a Gabriela Zebadua (www.mipartoenagua.com) las facilidades para este artículo. 

Autor

Written By
Lucía Velázquez

Deje un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *