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Pau Pijoan, el vino y el síndrome del convertible rojo

Pau Pijoan, el vino y el síndrome del convertible rojo
  • Publicado17 febrero, 2017

La famosa crisis de los cuarenta llegó a la vida de Pau Pijoan. Llevaba más de 30 años trabajando en el área de investigación como veterinario. Tenía un buen sueldo, una carrera exitosa, era parte del Sistema Nacional de Investigadores pero estaba cansado de hacer lo mismo y de esa monotonía cómoda.

Algunos hombres se comprarían un automóvil deportivo para sentirse más jóvenes y darle adrenalina a su vida pero Pau decidió hacer un vino, y como broma a esa catarsis que vivía bautizó a su bebida como Convertible rojo. Todo empezó como pasatiempo en 1999 y ahora Vinos Pijoan es una empresa que produce alrededor de 3 mil cajas al mes. La que en ese entonces era una pequeña finca, ahora es una vinícola formal.

“Estoy contento con la vida que me ha dado dos formas de existir: una de asalariado con pocos problemas pero pocas metas y este mundo en el que el cielo es el límite”, dice con esa sonrisa juguetona y franca tan característica. Pau sonríe, está atento a las preguntas y se emociona. Ama hacer vino y se nota.

Sus amores hechos vino

Esa pasión entrañable por el vino se traduce a que sus etiquetas de la serie Familia que llevan los nombres de las personas que él ama: Leonora (Cabernet Sauvignon y Merlot), su esposa; Paula (Zinfandel, Merlot y Petite Sirah), Doménica (Grenache, Syrah y Carignan) y Silvana (Chenin BlancSauvignon Blanc, Moscatel), sus hijas; Carmen María (Petit Sirah y Cabernet Sauvignon), su hermana; y Mare (Zinfandel y Merlot), su mamá. Y todo se hubiera quedado en sus vinos-mujeres si no hubiera creado a Manel, un oporto generoso que representa a su padre.

También hizo un Convertible rosa (Zinfandel, Merlot, Grenache y Colombard) y la serie Coordenadas, con cepas de dos orígenes, México y Francia.

Pau opina que este es un buen negocio, con sus complicaciones. Pero sobre todo, cree que es una buena forma de vida pues conoces gente interesante y ayuda a desarrollar tu sentido del gusto. “Aunque lo mejor de este mundo no es el ego, sino saber que formas parte de algo”, agrega.

Él considera que no se trata de hacer solo bebidas que le gusten al enólogo sino que  también se entienda lo que el mercado quiere. Asegura que el vino mexicano ofrece muchas variables y que nuestra comida marida a la perfección con todas esas opciones.

¿Qué le gusta comer?

Se confiesa carnívoro. Ama comer montalayo, pancita y barbacoa. Algún día le gustaría que pudiera llegar a algún puesto a comerlas y que le dieran un vaso de vino en lugar de un refresco para acompañar. Y para que eso sucediera esperaría que el gobierno fuera más un apoyo que un obstáculo al establecer la realidad de este elixir como un alimento y evitar tantos impuestos innecesarios a lo nacional.

El vino siempre ha estado en su cotidianidad. Se lo daban rebajado en agua desde los tres años y ahora lo hace en mermeladas. Tiene una obsesión por conservar alimentos debido a la herencia de su madre. Sus padres vivieron la Segunda Guerra Mundial y el exilio. Originarios de Cataluña, se casaron en México y Pau nació aquí. Y aunque su mamá era buena cocinera, su papá amaba guisar. Recuerda con cariño las paellas, los canelones rellenos de hígado de pollo y la carn d’olla, un puchero con una gran albóndiga y sabores reconfortantes.

“El próximo se iba a llamarTatuaje y el siguiente Arete. Nunca me haría el primero porque me da miedo y el segundo ya me lo puse y me lo quité”, bromea. Lo que es certero es que su Convertible rojo sigue corriendo y haciéndolo feliz. Salir de la zona de confort para seguir los ideales tiene su recompensa (y trasciende lo monetario).

¿Dónde encontrar a Pau y sus vinos?

Puedes comprar sus vinos en la tienda de vinos La contra (tiene diferentes sucursales).

Y si vas a Baja California búscalos en la zona de vinos de ese estado para degustaciones en su vinícola. Está ubicada en la carretera El Tigre, kilómetro13.5, Rancho San Marcos, en el poblado de Francisco Zarco.

Abren toda la semana. Sus horarios son de lunes a viernes, de 10 a 17 horas; sábado y domingo, de 11 a 18 horas (reciben a grupos menores de ocho personas). No es necesario reservar. Aceptan tarjetas de crédito.

Más información:

Página web: www.vinospijoan.com

Facebook: vinos.pijoan

Contacto: info@vinospijoan.com

Teléfono: (646) 127 1251

Agradecemos a Eme Media su apoyo para esta entrevista.

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Autor

  • Mariana Castillo

    Periodista y editora. Cultura alimentaria y perspectiva social. El mezcal es mi pastor. Me gusta lo cotidiano extraordinario y compartirlo en historias. Cuéntame, ¿qué te interesaría leer en este blog?

Escrito por:
Mariana Castillo

Periodista y editora. Cultura alimentaria y perspectiva social. El mezcal es mi pastor. Me gusta lo cotidiano extraordinario y compartirlo en historias. Cuéntame, ¿qué te interesaría leer en este blog?

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