Feria de la Alfarería, parada obligada en Iztapalapa durante Semana Santa
PorClaudia Aguilar
Publicado5 abril, 2019
En Iztapalapa hay quienes la conocen como la Feria de la Alfarería; otros, como la Feria del Barro o Tianguis del Barro. Hay, incluso, quienes se refieren a ella como la Feria de las Cazuelas, debido a las decenas de vasijas de este tipo que, durante Semana Santa, se extienden sobre cajas de cartón y manteles al ras de la Avenida Ermita y alrededores de la Alcaldía.
Feria de la Alfarería
El nombre de la feria es diverso, al igual que el talento de los artesanos provenientes de diferentes estados de la República, quienes año con año se preparan para viajar a este punto de la ciudad y ofrecer sus creaciones a las millones de personas que visitan la zona. Foto: Eulalia Balderas, alfarera originaria de Puebla.
De acuerdo con algunos artesanos, la Feria de la Alfarería comenzó junto con la primera Representación de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en Iztapalapa. Esto fue en 1843. En aquel entonces, artesanos llegaban a intercambiar sus piezas por productos comestibles. Foto: Mini juguetes de barro hechos por artesanos de Michoacán.
Con el tiempo, se fueron estableciendo y dando forma a este mercado ambulante donde hoy se venden ollas, jarros, vasijas, juguetes de madera, molcajetes, petates. Foto: Molcajetes elaborados en Toluca.
Imelda Lucierna, originaria de Santa Fe de la Laguna, Michoacán, recuerda que la primera vez que asistió a la feria fue con sus padres, quienes hace más de 30 años comenzaron a visitarla. Después de ellos, siguieron los hijos y nietos. “Nos gusta venir a México”, dice Doña Imelda. Foto: Doña Imelda y su hijo.
En el puesto de la familia se puede encontrar loza de barro -artesanía que sus padres trabajaban y con la cual llegaron la primera vez- y de cerámica. De esta última hay más piezas, pues “es la que más se vende”. Doña Imelda dice que su familia ya no la hace, ahora son otros artesanos. Foto: Loza de barro hecha en Oaxaca.
En la Feria de la Alfarería es común ver a artesanos llevando la producción de sus amigos o parientes. Foto: Miguel es originario de Guanajuato y vende vajillas de barro y cerámica.
Ellos se encargan de cuidarla y venderla. Es una forma de “echarse la mano”. Foto: Tazas de cerámica hechas en Guanajuato.
Eric Ortega es otro expositor que viene de familia de artesanos. Él cuenta que pertenece a la tercera generación. Sus abuelos viajaron de Guanajuato a Iztapalapa hace más de 50 años para vender talavera. Ahora, es él quien año con año realiza el mismo traslado. Le gusta: “Es una experiencia muy bonita, porque además de vender puedes convivir con otros artesanos. Es algo lindo”. Foto: Eric en su puesto.
En la Feria de la Alfarería la oferta es variada. Venden desde vajillas hasta alcancías como esta de yeso. Hay puestos en los que además de artesanías venden una pizca de humor. Foto: Cerdito hecho por artesanos de Michoacán.
También el Domingo de Ramos, fecha que marca el comienzo de Semana Santa, se pueden encontrar ramos (tradicionales y modernos). Foto: Puesto con cestos, sopladores y ramos tejidos con palma.
Si aún no conoces la Feria de la Alfarería, anímate a visitarla y de paso recorres otros puntos de Iztapalapa. Se ubica principalmente en las calles de Aldama y Cuauhtémoc, saliendo del metro Iztapalapa. Estará hasta el 28 de abril, en un horario de 09:00 a 20:00 horas. Foto: Cazuelas de barro de Tlaxcala.
5 Comentarios
Padre saber de la parte bonita de Iztapalapa 🙂
Se pone más padre cuando la visitas. 🙂 ¡Gracias por leer el Blog, Daniel!
¡Que belleza! Transmites el valor que merece ♥️
Janín 🙂 Muchas gracias por tu comentario. Espero hayas podido darte una vuelta por la feria.
Gracias por compartir in poco de nuestro mexico