Pizza frita, ¿la conoces?
“Si vas al sur de Italia la pizza frita es como un dios”, dice el cocinero Matteo Grandi. ¿La has probado? Para lograrla, él dice que solo necesitas una buena masa de pizza, una buena salsa de jitomate, albahaca, queso pecorino o parmesano y freírla.
Este chef italiano comparte que es típica de Nápoles y Apulia; su secreto está en que se fríe. Él la elabora, pero en una versión más ligera y pequeña como entrada en su restaurante Degusto, en San Bonifacio, Italia. Esta se infla cuando la masa entra en contacto con el aceite, así, luego se corta a la mitad y se rellena de cualquier ingrediente disponible.
Ya te contamos antes el origen de la pizza; al respecto de esta variante, Matteo explica que este platillo nació hacia a finales de la Segunda Guerra Mundial, pues debido a la crisis económica la gente comenzó a prepararlas para luego venderlas en las calles y así generar ingresos. Hacerlo así no exigía el uso de un horno. Con el paso del tiempo, comenzó a ser un platillo casero y sigue siendo popular en las calles y los restaurantes.
La receta de la pizza frita
En la página de St. Pellegrino comparten una receta de pizza frita para que la prepares cuando tengas curiosidad o antojo. Puede ser una variante interesante para ocasiones especiales y hasta en tu cena navideña para dar alternativas a los platillos de siempre.
Ingredientes:
- 250 gramos de harina
- 10 gramos de levadura de cerveza
- Aceite de oliva extra virgen (el necesario)
- 300 mililitros de agua
- 2 cucharaditas de sal
- Aceite de canola para freír
- 1 cebolla
- 400 gramos de jitomates pelados
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Un poco de albahaca
- 100 gramos de mozzarella
Procedimiento para la pizza frita:
- Coloca el agua y la sal en un tazón y mezcla bien.
- Agrega el aceite de oliva y vuelve a mezclar.
- En otro tazón, coloca la harina y la levadura. En el centro, agrega el líquido del primer recipiente.
- Comienza a preparar la masa con todos los ingredientes y a agregar lentamente todo el líquido.
- Amasa la mezcla hasta obtener una masa uniforme y elástica. Forma una bola y colócala en un tazón cubierto con harina.
- Cúbrela con papel film y ponla en un lugar cálido, lejos de los cambios de temperatura. Deja que la masa de la pizza leve por aproximadamente dos horas.
- Mientras tanto, prepara la salsa: fríe las cebollas picadas en aceite de oliva y luego agrega los jitomates pelados y machacados con un tenedor.
- Condimenta con sal y pimienta y cuece a fuego lento de 20 a 25 minutos.
- Forma bolitas con la masa, del tamaño de un huevo y colócalas en una charola.
- Cubre con papel film y deja que la masa leve un poco más por aproximadamente una hora.
- Con las manos, transforma las bolas en pizzas.
- Vierte el aceite de canola en una sartén y caliéntalo a 170 °C.
- Fríe las masas (pueden ser dos a la vez).
- Cuando estén doradas y fritas en ambos lados, añade la salsa de jitomate, el queso mozzarella y decora con unas hojas de albahaca y más aceite de oliva encima.
*Al freírse, la masa de la pizza aumentará de tamaño. También puedes cortarla en dos y rellenarla. La clave es servirla bien caliente para que su sabor sea el ideal.
Agradecemos al Culinary Fest of Italy del hotel Gran Velas Riviera Nayarit su apoyo para esta nota.
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