La piel se compone de tres capas, una de ellas es la dermis, el lugar donde se encuentran las glándulas odoríferas, controladas por las hormonas sexuales, que normalmente dan lugar a un olor muy especial: ese aroma único y característico de cada persona.
Todos percibimos de diferente manera los olores personales. Algunos pueden generarnos simpatía, y otros, antipatía. Incluso los aromas naturales del cuerpo pueden crear de manera inconsciente sentimientos espontáneos en el otro. Seguramente has escuchado a alguien decirte que tu olor le gusta o que cierto aroma le recuerda a ti.
¿Cuándo aparece este olor? Cuando las glándulas odoríferas producen una secreción un poco grasa en pequeñísimas cantidades y se concentran especialmente en axilas y órganos genitales.
Ojo, al hablar del olor personal, no nos referimos necesariamente a un mal olor. Cuando se genera un aroma desagradable es porque ya existen varias capas de glándulas productoras de sudor concentradas en axilas, ingles y pies, resultadas de una mala higiene o falta de ventilación.
Fuente: Cuida tu piel, Heike Kovács y Monika Preuk.