Injerto o implante de pestañas

Las pestañas son uno de los aspectos más importantes de nuestra apariencia facial y cuando una persona sufre de pérdida de cabello en esta área suele verse afectada en su apariencia y autoestima.

Si es tu caso y sufres de pérdida de pestañas por algún trauma físico, alguna enfermedad local en tu piel, a consecuencia de algún tratamiento médico, o simplemente porque  la naturaleza no te concedió unas pestañas grandes y abundantes, hay una forma de lucir unas pestañas bonitas sin que parezcan artificiales y exageradas como las famosas postizas.

Hablo de la restauración o implantación de pestañas, un tratamiento donde se colocan injertos de un solo cabello cuidadosamente en el párpado. ¿Suena maravilloso no crees? Pues lo es,  siempre y cuando acudas al lugar correcto para realizártelo; este procedimiento solo debe ser realizado por cirujanos con el equipo correcto ya que si lo hace alguien que no es experto,  podrías perder tus propias pestañas.

¿Existen riesgos? Sí existen, pero son mínimos. Como cualquier procedimiento si no se toman con seriedad las instrucciones y recomendaciones del médico, habrá complicaciones usualmente leves como lagrimeo excesivo, infecciones, resequedad en los ojos o hematoma retrobulbar (sangrado en los ojos).

Si te preocupa cómo es el procedimiento, éste no representa ningún dolor y su duración es de menos de una hora. Además no es necesario que vayas en repetidas ocasiones, con una sesión es suficiente.

Toma los beneficios de este procedimiento. Imagina levantarte con la mirada intacta como si estuvieras maquillada todo el tiempo ¿suena bien no? Contacta con algún centro o clínica especializada en trasplantación de cabello.

También te puede interesar: ¡Ayuda, mis cejas son muy delgadas! 

 

Autor

Salir de la versión móvil