Zona del Silencio, región de mitos y leyendas
En el vértice que forma los estados de Chihuahua, Coahuila y Durango, se encuentra la Zona del Silencio, una gran región llena de misterios y leyendas.
Su nombre se debe a que en esta zona desértica, las ondas hertzianas u ondas del sonido se propagan difícilmente, y en algunas partes dejan de percibirse, de aquí el nombre de “Zona del Silencio”.
Los visitantes que realizan el recorrido pueden observar abundancia de fósiles marinos petrificados con una antigüedad de 60 millones de años, lugar ideal para tomar video y fotografía.
Noches diáfanas de verano
Algo que caracteriza a la Zona del Silencio son las noches diáfanas de verano, donde se observan raros fenómenos luminosos en el cielo. Y en el día, la presencia de una flora desértica con características propias como los cactus y nogales; y una fauna impresionante donde destacan las pequeñas tortugas del desierto.
Muchas son las historias que se cuentan de este hermoso lugar, científicos e investigadores relacionan esta zona con el fenómeno ovni. Sin embargo, no hay aún una explicación satisfactoria. En el lugar llamado “Chupaderos” se han encontrado algunos restos de meteoritos, el mayor de 14 toneladas y otros que ya han sido trasladados al Palacio de Minería en la Ciudad de México.
Si piensas realizar este recorrido único, es necesario que vayas acompañado de un guía experimentado. No intentes el paseo sin apoyo de un guía. Las instalaciones son largas y es fácil perderse entre la multitud de veredas que tejen el desierto.
Una opción a tomar en cuenta para que disfrutes este recorrido sin dificultades es la empresa Safari Aventura, complejo Turístico de la Zona del Silencio que cuenta con una casa club, guías y actividades como rappel y kayak.
Dirección: Ojinaga 708, Centro, Chihuahua
Cómo llegar: Para llegar a la Zona del Silencio dirígete al km 155 de la carretera que va de Jiménez, Chihuahua a Durango.
Agradecemos a la Secretaría de Turismo de Chihuahua la información para este artículo.
