Ximena Díaz nos comenta hay niños que comen normalmente y están perfectos de peso, hay también niños que comen mucho, pero mucho, y están también bien de peso. Son niños con una constitución delgada o atlética y con un metabolismo basal lo suficientemente elevado como para ingerir gran cantidad de calorías sin engordar.
Esto se debe además de al metabolismo a la capacidad de las células de absorber nutrientes.
Sin embargo, no todos los niños que comen mucho tienen ese metabolismo y esa capacidad celular, son muchos los que empiezan a engordar y entonces es cuando debemos mirar todo lo que se está haciendo mal para enderezarlo y tratar de evitar posibles problemas de salud por un exceso de peso.
Se recomienda comer, más o menos, cada 3 horas. De ese modo se hacen unas 5 comidas al día, que es lo idóneo (mejor muchos pocos que pocos muchos). Las raciones que se recomiendan son de acuerdo a la edad.
Por horarios, por costumbre o por la razón que sea, son muchos los adultos que siguen haciendo tres comidas, desayuno, comida y cena, obligando al cuerpo a comer más cantidad en cada sentada, haciendo menos digestiones (cada digestión consume calorías) y estando menos activos tras cada comida (el cuerpo pide descanso para dedicarse a digerir todo lo que ha entrado).
Si a esto aunamos a los niños ansiosos faltos de ejercicio la cosa se complica. Hay algo importante: un niño debe reconocer sus emociones y lo que le provoca comer ya que si come con ansiedad bloquea el punto de saciedad en el cerebro, y entonces, no encuentra satisfacción por más que coma.
Otro punto es dormir bien, el sueño es regulador del hambre; un niño que duerme mal come mal.
Es importante resaltar que los niños absorben los hábitos de los padres y tarde o temprano acabarán haciendo lo mismo que ellos, seguir unos hábitos de comida incorrectos puede provocarles el tener sobrepeso.
Y si para rematar son de comer rápido, ya ni te cuento. Una de las recomendaciones para llevar una dieta equilibrada es comer despacio, porque a los 20 minutos de estar comiendo empieza a aparecer la sensación de saciedad.
Agradecemos a Ximena Díaz Reina, psicóloga clínica certificada en psicología transpersonal, constelaciones familiares, psicoterapia corporal creadora del programa de nutrición con apoyo psicoterapéutico.
