Carne a la tampiqueña: una comida orgullosamente huasteca
Tampico es una ciudad llena de contrastes, naturaleza y modernidad en un solo lugar. Además, en esta ciudad hallarás delicias ideales para satisfacer tu estómago. Uno de los platillos más populares es la llamada carne asada a la tampiqueña, pero ¿de dónde surge este delicioso platillo? Sigue leyendo y descúbrelo.
Creada por Don José Inés Loredo y su hermano Fidel
La carne asada a la tampiqueña o “Almuerzo Huasteco” es creación de Don José Inés Loredo, que a pesar de ser potosino de nacimiento, adoptó a Tampico como su segundo hogar. Luego de llegar a esta ciudad en 1915, Don José consiguió empleo como camarero en el Restaurante Ópera; pero la suerte y su tenacidad hicieron que pronto llegará a convertirse en el Presidente Municipal del puerto.
En 1939, Don José decidió abrir su primer restaurante en la Ciudad de México, al cual nombró Tampico Club; ubicado en la esquina de Balderas y Avenida Juárez. Este local daba servicio las 24 horas por lo que el jefe de la cocina, chef y hermano de Don José, Fidel Loredo, decidió que era importante comenzar desde muy temprano con un “almuerzo huasteco” que incluía un trozo de cecina huasteca, enchiladas verdes, queso fresco asado a la plancha y una porción de frijoles negros de la olla con epazote. Pronto se convertiría en un platillo que daría la vuelta al mundo.
De almuerzo a comida
Tanto gustó este platillo que los clientes llegaban la hora de la comida pidiendo el “almuerzo huasteco”, así que el nombre fue cambiado por “Carne Asada a la Tampiqueña”, adicionándole rajas con queso para hacerlo más completo. Pronto, la fama de este platillo llego a oídos de políticos, artistas y comerciantes quienes comenzaron a asistir al restaurante para deleitarse con este rico plato.
Pero como era de esperarse, muchos de los comensales frecuentes tenían un paladar un poco más refinado y argumentaron que la cecina estaba muy dura, así que Don José decidió cambiarla por un corte de filete en tira.
Todos los elementos del platillo tienen su simbolismo: el filete representa al río Pánuco, mientras que las enchiladas verdes remiten a los campos verdes de Tampico; el queso blanco la nobleza de la gente de la zona y los frijoles negros la tierra fértil de la huasteca, los cuales, con el paso del tiempo, fueron sustituidos por frijoles refritos.
¿Por qué se sirve en tabla?
En 1985, el hijo de Don Fidel quién había recibido la estafeta en el negocio familiar decidió cambiar el tradicional plato de loza oval por la tabla de cedro, con el fin de darle un distintivo al platillo y ofrecer una mejor presentación a este tesoro culinario.
Si quieres probar este tradicional platillo aquí te recomendamos algunos restaurantes que con seguridad satisfarán tu hambre.
¿Quieres disfrutarla en tu casa? Aquí te dejamos la receta.
Fuente: tampico.gob.mx