6 razones para visitar Zacatlán de las Manzanas

Pueblos Mágicos hay muchos, lejos, cerca y a la vuelta de la esquina; sin embargo, hay algunos que te roban el aliento desde el primer contacto con sus uniformadas calles. Este es el caso de Zacatlán de las Manzanas.

Ya sé, Puebla no es el estado más popular entre los chilangos o por lo menos algo que no sea Africam Safari o Cholula. Pero, si te encanta Hidalgo, te aseguro que Pueblo Mágico Zacatlán de las Manzanas te va a enamorar.

Acá te voy a doy 6 razones para visitar este hermoso Pueblo Mágico además, claro, de la calidez de su gente, la limpieza de sus calles y una neblina que ofrece paisajes únicos.

1. Reloj Floral

Este es uno de los emblemas de Zacatlán de las Manzanas, incluso se ha convertido en el principal punto para turistas nacionales y extranjeros.

Con cinco metros de diámetro en sus dos caras, impone su valía en la Plaza Cívica. Se encuentra adornado por coloridas flores naturales y, por si fuera poco, cuenta con nueve melodías que suenan en distintas horas del día.

Fue donado por Relojes Centenario en 1986 en honor al famoso relojero Alberto Olvera Hernández y, desde entonces, no ha dejado de encantar las calles de este Pueblo Mágico.

2. Mirador de Barranca de los Jilgueros

Este lugar te resultará impresionante, ya que un pequeño medio círculo sobresale de la seguridad del asfalto para colocarte sobre la barranca. Así es, solo tú y el cristal bajo tus pies antes una maravilla natural incomparable.

Es conocida como Barranca de los Jilgueros debido a la presencia de estas aves en la zona y créeme, no te arrepentirás de visitarla. Además de la construcción sobresaliente, puedes recorrer la orilla de la barranca en una caminata de un kilómetro.

Prepara tu cámara, pues si tienes suerte podrás captar un fenómeno casi mágico en el que la temperatura del aire combinada con la del fondo de la barranca, el sol y las corrientes de aire: Mar de leche o Mar blanco harán que la bruma se torne tan densa y blanca que se asemeja a un gran mar desde las alturas del mirador.

3. 

   Mural Paseo de la Barranca

Bueno, si la vista te encantó, el Mural Paseo de la Barranca te dejará más que fascinado. Con poco más de 100 metros de largo, este majestuoso mural hecho de pedacería de vidrío de colores resalta con los escasos rayos del sol o entre la densa bruma.

El proyecto fue planeado y gestionado por Mary Carmen Olvera, aunque el diseño corrió a cargo de Trish Metzner-Lynch, quien enseñó a los habitantes de la zona este bello arte plástico.

Así, mientras los primeros murales cuentan con trozos grandes y trazos bruscos, conforme recorres el mural es posible distinguir la evolución de los artesanos. Las imágenes destacan los principales atractivos de Zacatlán como la manzana, las cascadas y un gran reloj de la familia Olvera que ha ofrecido generaciones de impecables relojeros.

4. Palacio Municipal

Esta construcción es en verdad bella. Fue construida entre 1876 y 1896 pero el diseño corrió a cargo de un arquitecto francés justo antes de la icónica Batalla de Puebla. Es de estilo neoclásico con relieves de cantera gris.

Aquí se llevan a cabo la mayoría de los trámites legales del pueblo; sin embargo, por las noches, cuando algunos descansan, decenas de luces iluminan sus cimientos, techos y ventanas, ofreciendo un espectáculo incomparable. Ahora, imagina la misma escena con una densa neblina que aviva la belleza y despierta el suspenso.

5. Cascadas 

A tan solo 15 minutos del zócalo se encuentra la Cascada de San Pedro, que posee una caída de 20 metros y una vista impecable y más cerca de lo que observas en el mirador de la Barranca de los Jilgueros.

Un poco más lejos, a 11 kilómetros para ser exactos, se localiza la Cascada de Tulimán. Con 350 metros de altura ofrece una de las caídas más estridentes del país. Además, al fondo de sus aguas se localiza un manantial de agua mineral y un gran árbol de Papalotl con un enorme agujero que puede albergar hasta 15 personas al mismo tiempo.

Un puente colgante y una tirolesa de 120 metros son otros de los atractivos que ofrece este gran lugar.

6. Licor, vino y pan

Así es, de hecho es posible visitar el Museo del Vino en el que apreciarás la elaboración de vinos y licores hechos a base de diversas frutas. Es imperdonable que te vayas sin probar el licor de café y el vino de manzana.

Por otra parte, lo característico de Zacatlán de las Manzanas, como su nombre lo dice, es la manzana y está presente en la repostería con unas deliciosas manzanas hojaldradas . Tampoco puedes dejar de probar el icónico pan de queso que inunda las calles y panaderías de la ciudad.

Ahora sí, dime ¿cómo no visitar Zacatlán de las Manzanas?

También podría interesarte…

Una escapada a San Joaquín, Querétaro

Misiones Franciscanas de la Sierra Gorda, un tesoro entre la selva

Real del Monte, ese lugar de calles y fachadas fascinantes que está en Hidalgo