El Huarache Azteca en Jamaica: donde nació esta garnacha
Para todas esas personas aventureras que gustan de lugares increíbles para garnachear, crudear y romper la dieta, acá está el Huarache Azteca en Jamaica, un lugar en el que sí, tendrás que esperar, pero valdrá la pena.
El Huarache Azteca en Jamaica
Esta joya de la gastronomía se localiza en la Calle Torno 154, justo del otro lado del icónico mercado de Jamaica. Está cerrado los martes y si decides ir en sábado o domingo, lo más probable es que tengas que esperar alrededor de 30 minutos.
Pero, no creas que será trágico, ya que justo afuera hay una señora vendiendo unos panqués de nuez tan ricos y suaves que se deshacen en tu boca para mitigar el hambre de la espera.
Una vez que pases, lo verdaderamente difícil será elegir entre todas las opciones. Estos huaraches no son como los que acostumbras. Son algo así como tlacoyos más grandes rellenos de frijol, fritos y acompañados con lo que quieras, desde el sencillo con salsa, crema y queso (un queso realmente delicioso) hasta el de arrachera, mole verde y pastor. ¿Ya se te antojó?
Para no “pasarte el huarache a brincos”, puedes disfrutar de sus deliciosas aguas hechas al momento, un refresco, café de olla o un juguito, tú decides.
Los creadores del huarache
Además de su increíble menú, el Huarache Azteca en Jamaica también se adjudica la creación del huarache. Hace 70 años, la Señora Carmen Gómez enviudó y tuvo que ingeniárselas para mantener a sus cinco hijos.
Con la ayuda de su hermana (tan luchona como ella) logró poner un puesto con unos cuantos bancos y un comal y, sin tener idea de cómo hacer una tortilla ni nada, se las ingenió para vender. Como las mejores cosas son las que no se esperan y suceden por accidente, su inhabilidad en las artes del comal derivó en la invención del huarache.
No sabía si era un tlacoyo, una gordita o qué, pero la gente comenzó a llamarle huarache por su similitud a la suela de este calzado. Y es que en realidad, todas las garnachas tienen algo en común: grasita y tortilla.
La señora Carmen era conocida por ser dadivosa y procurar a la gente de su barrio. Hoy, el Huarache Azteca en Jamaica sigue, y el secreto continúa siendo el trato familiar y la innovación. Por lo que el lugar no es lujoso, pero es acogedor, amplio y recibe desde el crudo malhumorado hasta las tres generaciones de una familia.
No porque algo no exista o alguien más no lo haga no quiere decir que sea una mala idea.
Ahora que te conté un poco de sus delicias, ¿te lo vas a perder? Aprovecha el fin de semana y lánzate a engordar y romper los propósitos de año nuevo como se debe, acá más información.
Foto principal: El Huararche Azteca