Las raspadas de maíz me recordaron a los totoposte de Los Tuxtlas, Veracruz.

Para prepararlos se hace una tortilla a mano y se cuece ligeramente al comal. Luego, se raspa por un lado para desechar la parte que está cruda y volverse a tostar y hasta freír (algunos guardan la masa restante para hacer tamales).

Raspadas de maíz: una delicia de Occidente

La señora Martha Peña, en Santiago de Pinos, Jalisco fue la maestra: intentamos hacer varías y no es nada fácil. Ella siembra, cosecha, muele y multiplican los granos que ella y su esposo siembran.

No solo se consumen en este lugar: en varios lugares del estado y el occidente mexicano está presente.

Las raspadas de maíz como alimento cotidiano

Se comen para desayunar, comer, cenar o como antojo: no son platillo de fiesta sino alimento de diario.

En México hay mucho más que tortillas: desde los tamales hasta este ejemplo son una muestra de que la infinidad de variantes y funciones sociales del maíz es maravillosa.

Martha explica que cada vez hay menos mujeres que las hagan: hacer tortillas en las casas con nixtamal y no con masa mejorada, es algo esencial para nuestra cultura y se está perdiendo.

Cuéntanos, ¿qué alimentos con maíz son parte de tu cultura alimentaria?

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¿Ya has probado las raspadas de maíz?