Una de las poblaciones más bellas y típicas del Estado de México es Aculco, un pueblo con encanto en donde encontrarás un remanso de tranquilidad en medio de bellezas naturales y majestuosos paisajes de columnas basálticas que parecen tocar el cielo. Ubicado a una hora de la Ciudad de México, este rincón mexiquense cuenta con un clima templado, ideal para recorrer sus calles y acercarse a su cultura a través de los otomís, etnia que ahí habita y que aún conserva sus milenarias tradiciones.
¿Qué no te puedes perder?
Antes que nada es muy recomendable darte una vuelta por el poblado y admirar su tradicional arquitectura, callejones, columnas de cantera y casas de patios amplios crean un pintoresco cuadro. Ahora que ya le echaste un primer vistazo, es tiempo de conocer cuáles son los imperdibles de este paraíso mexiquense.
Parroquia y ex convento de San Jerónimo
Construido en 1540 por monjes franciscanos, este recinto religioso cuenta con un estilo del medievo europeo con pequeñas ventanas y contrafuertes. En su interior se encuentra un óleo de la Virgen de Guadalupe realizado por Miguel Cabrera, uno de los artistas más famosos y cotizados de la época; también encontrarás una pintura de San Antonio de Padua de Juan Nepomuceno.
Santuario del Señor de Nenthé
Este santuario está dedicado al Señor de Nenthé o “Señor del Agua”, uno de los personajes más adorados por los habitantes de la región ya que se le atribuyen varios milagros.
Balneario Municipal
Para refrescarse y darse un chapuzón puedes visitar el Balneario Municipal que cuenta con una alberca olímpica, además de varios puestos de comida típica, artesanías y espectáculos musicales.
Cascadas La Concepción y Tixhiñú
Estos saltos de agua tienen una altura de 25 metros y son uno de los sitios que no puedes dejar de conocer en tu visita a Aculco. Se ubican a 10 kilómetros de la cabecera municipal sobre la carretera Aculco – Amanalco y es un espectáculo digno de verse.
¿Qué comer?
Uno de los platillos más tradicionales no solo de Aculco sino del Estado de México es la barbacoa, en este poblado encontrarás diversos lugares para disfrutarla. También puedes probar las carnitas y los escamoles.
Para endulzar el estómago nada mejor que los jamoncillos o los panes de panaderías artesanales de la región, además de una gran variedad de dulces de leche. Para brindar el pulque es la mejor opción, aunque también encontrarás licores y agua de diferentes frutas.
¿Cómo llegar?
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Si sales de la Ciudad de México toma Periférico Norte y continúa por la autopista 57 México – Querétaro, al llegar al kilómetro 115 toma la desviación a El Rosal y Arroyo Zarco. Aculco se ubica a 15 kilómetros de dicha autopista.
Saliendo de Toluca solo toma la Autopista 55 con dirección a Querétaro, llegando a Atlacomulco continúa por la carretera federal 55 hasta llegar a Acambay. Unos cuantos kilómetros después encontrarás Aculco.
Fuente: Turismo del Estado de México
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