La historia del pueblo de Iztapalapa en un libro hecho por vecinos

pueblo de Iztapalapa

Foto: Claudia Aguilar

El pueblo de Iztapalapa tiene muchas historias en sus plazas, calles, museos, iglesias, cerros y rincones. Sus habitantes lo saben. A los que no son del lugar puede parecerles raro, pero para los que viven en uno de los ocho barrios es normal escuchar en las calles a los nostálgicos iniciar conversaciones con un: “¿Te acuerdas cuando…?”. En 2014, recuerdos como estos fueron inspiración para algunos iztapalapenses, como los del Grupo Cultural Noche Victoriosa, quienes con la idea de contarles a más personas sobre las muchas riquezas del pueblo de Iztapalapa comenzaron a editar un libro.

El libro que cuenta la historia del pueblo de Iztapalapa

Tras años de trabajo y colaboración con otros vecinos, los integrantes del grupo lograron reunir mapas, documentos y fotografías que muestran la creación de los primeros calpullis en los ocho barrios actuales, la construcción de la Central de Abasto, las historias de deportistas, artistas, músicos y otros personajes. Al libro lo titularon Memoria gráfica del pueblo de Ixtapalapa.

Y para saber más de él, una de las integrantes del grupo cultural, la cronista Beatriz Ramírez, nos cuenta en esta charla sobre los temas, hallazgos y el valor de un material como este que rescata la historia del pueblo.

Antes que nada, ¿por qué Ixtapalapa y no Iztapalapa, así con z?

Beatriz Ramírez: Una cosa que quisimos hacer con el libro fue rescatar los nombres originales; de ahí que el nombre del libro haga referencia a Ixtapalapa, con x, no con z. Lo hicimos con la intención de diferenciar entre pueblo y demarcación. Dentro del libro se explica un poco este tipo de ortografía y significado que tiene que ver con la geografía de Iztapalapa en la época prehispánica.

¿Qué significa Ixtapalapa?

BR: Muchos le dan el significado de “sal” al pueblo, pero a mí no me parece esta relación directa, porque, a diferencia de Iztacalco, donde el glifo refuerza que se trata de una casa de sal, el glifo de Ixtapalapa representa una zona de tierra rodeada de agua.

Hay que recordar que la agricultura era la actividad económica principal del pueblo. En las chinampas se daba rábano, maíz, alcachofa, lechuga, betabel y chile. Además aquí pescaban, se habla mucho de la carpa y el pececito blanco. También de aves acuáticas que llegaban a los lagos. Había un poco de producción de sal, pero no de manera determinante. Por eso yo no estoy de acuerdo con que le den el significado de “sal” al pueblo.

Ahora sí, ¿por qué un libro sobre el pueblo de Iztapalapa?

BR: Cuando metimos el proyecto por primera vez al Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC), nos lo rechazaron. El argumento fue que ya había muchos libros sobre Iztapalapa. Pero no era así, porque es diferente Iztapalapa demarcación que Iztapalapa pueblo, y a partir de eso dijimos que sobre el pueblo no había tanto material y hacía falta. No había nada como lo que planteábamos, quizá folletos más pequeños, pero no una memoria gráfica sobre el pueblo.

Cuénteme: ¿cuáles son los temas que abordan en Memoria gráfica del pueblo de Ixtapalapa?

BR: El libro abarca desde finales del siglo XIX hasta principios de los años 80, cuando desaparecen las zonas agrícolas en el pueblo de Iztapalapa, tanto en el Cerro de la Estrella como en la Central de Abasto. Es un cambio importante porque se pasa de lo rural a lo urbano. Esos son los límites cronológicos.

En cuanto a los temas, se habla, por ejemplo, de la creación de los primeros calpullis en los barrios actuales, que son ocho; las actividades económicas, escuelas, deportistas y otros personajes, el proceso de urbanización. Trae algunas canciones (incluimos el himno de Iztapalapa, aunque ya se había publicado antes), algunas poesías. Obviamente toda nuestra información está basada en una serie de fuentes. Al final del libro incluimos las fuentes bibliográficas y hemerográficas para que quien quiera investigar más sobre un tema lo pueda hacer.

Los textos del libro son muy cortos. No quisimos llenarlo de texto, pero está muy cuidado. Son concretos y concisos para introducir a cada uno de los temas del libro.

Sobre los personajes, ¿a quiénes podemos encontrar?

BR: Uno por excelencia es Cuitláhuac. Es el primero que aparece en este apartado, porque es un personaje histórico que además se recuerda como un héroe, porque enfrentó al ejército de Hernán Cortés. Dirigió la famosa batalla de la Noche Triste que nosotros conocemos como la Batalla de la Noche Victoriosa.

Se encuentra también a Manuel Maguey, cronista de Iztapalapa, abuelo de uno de los miembros del grupo. Incluimos a escultores como Pancho Cárdenas, gobernantes, médicos, párrocos y  parteras como doña Rosita, quien junto con su esposo atendía a las personas en la Quinta Rosita, una casa que hoy todavía se puede ver, aunque ya está deteriorada.

El pueblo de Iztapalapa ha sido tierra de músicos, por lo que incluimos orquestas como Escuadrón Azul, a Quirino Mendoza y Pedro Xolalpa, quienes escribieron y compusieron la música para el himno de Iztapalapa.

Está también Rafael Álvarez Pérez, él recopilaba muchas piezas arqueológicas en el Cerro de la Estrella y después las donó al museo para conformar el primer acervo. También incluimos al señor que tuvo el primer puesto de periódicos en el pueblo de Iztapalapa.

Quienes aparecen aquí tienen que ver con lo que estuvo disponible, con lo que nos compartieron los vecinos. En una de las presentaciones de libro hubo quien nos dijo que por qué él no estaba ahí. Nosotros solo le recordamos que estuvimos pidiendo material. Por eso es que el siguiente libro queremos que sea sobre personajes de la vida cotidiana. Esperamos que los vecinos del pueblo de Iztapalapa nos apoyen con material.

¿Cómo fue hacer un libro entre vecinos?, ¿fue fácil reunir el material?

BR: El proyecto del libro comenzó con compañeros de los ocho barrios. Yo les comentaba que por qué no hacíamos un libro a partir de las fotografías que teníamos y luego incluíamos textos. Digamos que los estuve provocando. Luego escuchamos la convocatoria de PACMyC y metimos el proyecto. Entonces se conformó el grupo cultural, le llamamos Noche Victoriosa. Empezamos 12 miembros, pero poco a poco fue cambiando el número. Unos ya salieron.

Después de ser aceptado, el apoyo que dieron fue de 50 mil pesos, el límite que daban en ese momento. Con el proyecto aceptado y el dinero de por medio no había otra más que trabajar y trabajar. Tuvimos un año para entregar el proyecto. Finalmente hicimos la recopilación, ordenamos la información por temas y fechas.

Todos hicimos trabajo en equipo. Fuimos a hacer trabajo de hemeroteca. Seguimos recopilando fotos, planos, documentos personales como boletas de calificaciones, diplomas. Mucho lo aportaron los miembros del grupo, tres en especial, que son quienes ya tienen un acervo importante de fotografías y notas de periódicos. Otra parte fue donada por personas que atendieron a la convocatoria que lanzamos para recaudar material y a las exposiciones que montábamos para difundir el proyecto, porque el dinero al final no nos alcanzó. Hicimos rifas, eventos culturales y otras actividades. Todo para juntar el dinero faltante.

Te puedo decir que lo más complicado de esta investigación fue realizar las labores de convencimiento para que los pobladores prestaran sus imágenes. Les decíamos que solo tenían que prestárnoslas por unas horas para escanearlas y después se las regresaríamos, pero al principio lo dudaban. Al final los vecinos nos apoyaron.

¿Por qué cree que los vecinos del pueblo de Iztapalapa apoyaron su proyecto donando y prestando sus materiales?

BR: La gente le tomó cariño al proyecto editorial porque les generó nostalgia, cariño. Cuando tú generas este sentimiento de identidad, de amor por el espacio donde vives hasta lo cuidas más. Es identidad, es arraigo, es preservación de lo que aún queda. Se ha perdido mucho del paisaje natural (como el área natural protegida del Cerro de la Estrella), pero creo que proyectos como estos pueden servir para que no se pierda todavía más. Es una forma de cuidar, de proteger.

Más información sobre la historia del pueblo de Iztapalapa:

El libro Memoria gráfica del pueblo de Ixtapalapa puedes encontrarlo en el Archivo Histórico, en la explanada de la Alcaldía Iztapalapa. Lo puedes consultar o comprar y así conocer más sobre este lugar de la ciudad de México. También lo venden en el Restaurante Ayluardos (Aldama 72, Barrio San Pablo); y en la Veterinaria del dr. Vicente Romero (Calle 5 de mayo, Barrio La Asunción). Cuesta $200 pesos.

Facebook: ArchistoricoIztapalapa

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