Los antioxidantes los produce el cuerpo de forma natural, pero con la edad van disminuyendo, por lo que sus efectos benéficos también. Tienen la capacidad de retardar, prevenir o contrarrestar los efectos nocivos de los radicales libres generados por agentes externos a nosotros, como la contaminación, la mala alimentación, la falta de nutrimentos en la dieta por comer poco o a deshoras, y desvelarse.
Sin embargo, si escoges tu dieta cuidadosamente los antioxidantes pueden realizar lo siguiente:
Protegen tu corazón
La gente que consume una gran cantidad de frutas y verduras ricas en antioxidantes tienen un riesgo más bajo de cardiopatía, según lo demuestran los estudios. Otras buenas fuentes de antioxidantes saludables para tu corazón son el té, el café y el vino: bebidas que contienen concentraciones elevadas de flavonoides. Los estudios sugieren que una dieta rica en flavonoides disminuye el riesgo de cardiopatías hasta en un 65%.
Protegen tu ADN
Los radicales libres pueden dañar el ADN de células sanas, lo que altera su funcionamiento y hace que se reproduzca incontrolablemente formando tumores cancerígenos. Los estudios de laboratorio demuestran que los fitoquímicos detienen el crecimiento de tumores de diferentes maneras, entre las que se incluyen neutralizar y desmovilizar a los radicales libres.
Controlan problemas de diabetes
Un alto índice de azúcar en la sangre incrementa la producción de algunos radicales libres inusualmente malos. Estas moléculas destructivas probablemente causen algunas de las complicaciones que hacen de la diabetes algo tan aterrador, como la ceguera, daños al sistema nervioso e insuficiencia renal.
Defienden contra la demencia
Las neuronas de las personas diagnosticadas con condiciones cognitivas devastadoras muestran evidencias de daño por radicales libres. Y lo que es más, éstos parecen ser una causa del acumulamiento de proteínas en el cerebro, llamada amiloide, que es característica del Alzheimer.
Protegen tu vista
Investigaciones recientes sugieren que otros fitoquímicos antioxidantes también son de suma importancia para preservar tu vista. Por ejemplo, la luteína, otro carotenoide como el beta-caroteno, que se encuentra en cantidades considerables en la espinaca, la col verde y la col silvestre. Las células de la retina que se encuentran en la parte trasera del ojo absorben luteína, aparentemente, para protegerlo de los radicales libres.
Consumir más alimentos con estos antioxidantes también puede ayudar a prevenir cataratas. Así que come tus zanahorias y no escatimes en los vegetales, las calabazas, el maíz y los chícharos, ya que todos son fuente de luteína y zeaxantina, como también lo son las yemas de huevo, el melón dulce y el kiwi.
El café es fuente natural de antioxidantes ya que proviene de las cerezas del café, fruto que aporta una importante cantidad de antioxidantes naturales. De hecho, el café ocupa el sexto lugar entre los 50 alimentos con mayor contenido de antioxidantes.
Recuerda, entre más incluyas alimentos antioxidantes en tu dieta diaria, mejor salud y belleza tendrá tu cuerpo.
Fuentes: salud180.com, nutrióloga Marybel Yáñez twitter @nutmarybelyanez
Información proporcionada por NESCAFÉ
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