El pensamiento disruptivo se ha transformado en un término común en pláticas de tecnología y liderazgo. En su más reciente visita al país, Jonathan Knowles, director del área académica de Singularity University, hizo énfasis en la importancia de este tema. Esto ante varios emprendedores.
Pensamiento disruptivo: de dónde viene el término
La palabra “disruptivo” procede del inglés disruptive, la cual define a algo que produce una ruptura brusca. Sin embargo el término se ha utilizado en los últimos años en el sector de tecnología como sinónimo de innovación.
“Ser disruptivo significa que estás haciendo un cambio importante o determinante para la sociedad. Mantener un pensamiento disruptivo te podrá convertir en un líder innovador, que genera ideas y marca un punto claro de partida”, precisó Knowles.
El pensamiento disruptivo como filosofía de vida
Cuando los emprendedores ven lo que el ojo común no alcanza a apreciar, es cuando logran tener un pensamiento disruptivo. Esto es lo que dice Knowles, quien también es director de tecnología en Autodesk.
“La actitud mental exponencial es la noción de la duplicación. La Ley de Moore tal vez es el mejor ejemplo de este pensamiento”. Esta ley es un término originado en 1965, que establece que la velocidad del procesador total de las computadoras se duplica cada dos meses.
Es decir, cuando apenas la generalidad está asimilando una computadora y aprendiendo a usarla, en la industria ya se desarrolló un prototipo más avanzado. “Esta es la tendencia que se aplicó a los chips y a toda la tecnología computacional; no hay razón por la que esto vaya a cambiar”, dijo Knowles durante su presentación. Asimismo, afirma que el avance de nuestro pensamiento debe ser igual de rápido.
Pensar sin límites
La idea de que el pensamiento disruptivo se fomente en las universidades es, para Knowles, una necesidad inmediata. “El significado de ser un ingeniero será muy diferente en el futuro, necesitamos que cada vez más jóvenes busquen pensar distinto”.
Si Steve Jobs o Reed Hastings, fundadores de Apple y Netflix, respectivamente, no hubieran tenido ideas exponenciales, nunca hubieran logrado tener empresas exitosas, contó. En cambio, Kodak o Blockbuster, empresas con “pensamiento lineal”, fracasaron luego de facturar millones de dólares y alcanzar la cima.
Pensamiento disruptivo y entorno organizacional
“Actualmente quien no mira el entorno organizacional de forma exponencial tiene menos de 40% de probabilidades de no seguir en el mercado en los próximos años”, estimó Knowles. Además, dijo que el trabajo en equipo será la opción para seguir haciendo proyectos.
La tecnología requiere pensamiento disruptivo
“La tecnología por sí sola no arreglará todo”, destacó Knowles y explicó que la solución de los desafíos globales requerirá un conjunto de herramientas tecnológicas, así como una mentalidad exponencial. “Ninguno de nosotros, por sí solo, piensa exponencialmente”, por ello debemos capacitarnos constantemente y retroalimentar nuestro trabajo dentro de una organización.
Si en tu equipo de trabajo necesitas creativos, técnicos, administrativos y ejecutantes de proyectos, lo ideal es que los juntes a trabajar a todos. De esta forma es posible que ellos te ayuden a aclarar tus ideas. Para después resolver los problemas en conjunto.
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