Capula, el hogar de las catrinas de barro
Capula se encuentra al Oeste de Morelia, a 17.5 kilómetros por la carretera federal No. 15 Morelia-Guadalajara.
Este poblado destaca por la intensa actividad artesanal que aquí se desarrolla y que lo llena de vida durante todo el año.
Su producción tiene una gran trascendencia ya que además de ser el sustento económico de sus habitantes, es el único pueblo del estado que cuenta con el reconocimiento “región de origen” para tres tipos de artesanía de barro: la alfarería punteada, catrinas de barro y loza tradicional.
Aquí se guardan celosamente las técnicas antiguas de la fusión indígena y española para la elaboración de su alfarería; artesanía de la población con una experiencia y habilidad únicas.
Estas técnicas se pulen y sobresalen para revestir su fiesta patronal, los alfareros organizan desde hace muchos años un concurso artesanal en el que premian el mejor trabajo; el afortunado ganador venderá todas sus piezas y tendrá el reconocimiento del gremio.
El pueblo cuenta con talleres de exhibición, donde sus artesanos trabajan el barro con un deleite y dedicación que dan como resultado una de las riquezas artesanales para el estado.
Los orígenes de la alfarería en Capula datan del año 1550, cuando el fraile Vasco de Quiroga trajo el oficio del barro, y debido a que se cuenta con la materia prima en las cercanías del lugar, este oficio ha crecido constantemente y se conserva hasta nuestros días.
Uno de los sitios imperdibles en Capula es la Casa Taller del pintor y escultor Juan Torres, creador de las famosas “Catrinas”, peculiar expresión popular de nuestra muy mexicana concepción de la muerte.
Capula se viste de gala cada 25 de julio para festejar a su patrono, el señor Santiago. Famosas son ya su opulenta celebración y las torrenciales lluvias que suelen caer este día.
Descubre la magia que envuelve su labor con la alfarería y cada uno de sus preciosas creaciones y si las conoces, cuéntanos qué tal te fue.
Fuente: Turismo del estado de Michoacán