¿Qué hacer? Medio ambiente

3 beneficios de la reforestación que quizá no conocías

3 beneficios de la reforestación que quizá no conocías
  • Publicado25 enero, 2018

¿Cuántos árboles has plantado en los últimos años? ¿Sabías que la reforestación es una actividad que todos deberíamos hacer por lo menos una vez al año? Al plantar árboles en terrenos donde antes no los hubo –y, claro, utilizando ciertos métodos y técnicas–, ayudamos a la rehabilitación, recuperación, conservación y protección de selvas, bosques, humedales y zonas áridas. Los beneficios de la reforestación son muchos, según nos explicó Gerardo Villa Ceballos, Coordinador de Desarrollo Nacional (en la región centro) en Reforestemos México. Sin embargo, a continuación te platicaré cuáles son los principales.

Beneficios de la reforestación

  1. Sensibiliza y te acerca a la naturaleza

“Al año tan solo se deforesta dos veces el tamaño de la Ciudad de México, ya sea por tala clandestina, por incendios forestales o por cambio de uso forestal a agrícola. Calculando los millones de habitantes que somos, aproximadamente cada persona debería plantar cinco árboles al año para así equilibrar toda la parte deforestada”, remarca Gerardo Villa Ceballos.

A veces por estar encerrados en las oficinas o escuelas, se pierde el contacto con la naturaleza. Al plantar un árbol (o más) de inmediato creas esta conexión y te das cuenta del valor que tienen los espacios naturales, ya que conoces todo el proceso: la selección correcta de especies en el sitio a reforestar, la elección y preparación del terreno, el contacto con los habitantes de la zona para incorporarlos desde la planeación, el diseño de la plantación, la protección (contra animales, incendios forestales, por ejemplo), el mantenimiento (control de maleza, fertilización, reposición de planta muerta, podas y aclareos), y también el seguimiento que se le da a las especies.

  1. Genera servicios ambientales

“Muchas veces creemos que al no intervenir ni afectar a la naturaleza es suficiente y que esta se cuidará sola –dice Gerardo– .Y la verdad es que no es así, pues necesita mucho de la participación del hombre para que el ecosistema provea los llamados ‘servicios ambientales’”. Según la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), los servicios ambientales son los beneficios que la población recibe de un ecosistema; en este caso hablamos de los beneficios que ofrecen los árboles. Por ejemplo:

  • Protegen o adornan en una región, un lugar o un sitio (parques, banquetas, camellones, por mencionar algunos).
  • Amortiguan el impacto de las ondas sonoras, reduciendo los niveles de ruido en calles, parques y zonas industriales.
  • Controlan la intensidad de luz. Los árboles alrededor de las casas filtran el aire cálido y lo refrescan al cruzar su copa; sombrean paredes, patios, techos y otros. En zonas cálidas apoyan la economía de las familias porque contribuyen a reducir el uso de aire acondicionado.
  • Refrescan el ambiente y contribuyen a la limpieza del aire, ya que sus hojas retienen partículas contaminantes producidas por actividades como el transporte y la industria.
  • Por medio de la fotosíntesis, los árboles ayudan en la captura de carbono, con lo que contribuyen a disminuir el calentamiento del planeta.
  • Los árboles ayudan a proteger la riqueza y diversidad de formas de vida. Son el hábitat y fuente de alimento de muchas especies de animales como: aves, ardillas, lagartijas e insectos.
  • Protegen el suelo de la erosión provocada por el viento o la lluvia. La presencia de árboles evita tolvaneras y la pérdida de suelo fértil.
  • Las raíces de los árboles retienen y absorben el agua de lluvia y favorecen la recarga de los mantos de agua.
  1. Crea empleos temporales

¿Y quién les dará mantenimiento y demás a las áreas reforestadas? Sembrar árboles ayuda a la generación de empleos temporales en los que la gente de las comunidades puede participar.

“Para reforestar primero debes tener contacto con los dueños de la tierra. Más del 80% de los bosques que tiene México son propiedad de ejidatarios y comunidades; el otro 20% son federales y privados”, menciona Gerardo y nos dice también que luego de hablar con los dueños entonces viene la tarea de incluir a todas las personas de la zona en diferentes actividades que inician desde la planeación de la reforestación para que después se sumen al cuidado, a la conservación y a la ampliación y evolución de los ejemplares.

¿Qué dices? ¿Te apuntarás a alguna campaña para plantar tus respectivos cinco árboles de este año?  

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Autor

Written By
Claudia Aguilar

Pata de perro profesional.

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