Desde hace más de 40 años Tlalpujahua, uno de los hermosos Pueblos Mágicos de Michoacán, es el principal productor de esferas navideñas en la República Mexicana.
Este pueblo mágico adopta la creación de esferas navideñas como pilar económico en México; realiza alrededor de 38 millones de esferas para venta nacional e internacional.
Esta tradición comenzó por el señor Joaquín Muñoz Orta, quien emigró a Estados Unidos en donde aprendió a fabricar adornos navideños. Para el año 1965 él y su esposa, María Elena Ruíz regresaron a su pueblo natal y comenzaron el taller “Adornos Navideños”.
La elaboración de las esferas es todo un arte, el proceso es “hecho a mano”, su producción parecería sencilla, pero para ver terminada una esfera simple son necesarios 4 pasos: el soplado del vidrio, paso que se realiza con la exposición del vidrio ante un soplete y los pulmones del trabajador, después le sigue el cromado color plata dentro de una válvula que lo aplica; para luego pasar con las personas encargadas de decorar la esfera, las más sencillas sólo se les aplica pintura, otras suelen tener brillantina y chaquira, al final queda la aplicación del colgante y el empaquetado.
Tlalpujahua no sólo realiza las típicas esferas navideñas redondas, los artesanos han creado un sinfín de figuras que ellos mismo han nombrado como gotas, churritos, luz de luna y las más difíciles para ellos, las campanas (estas se realizan sin necesidad de moldes, todo es a tanteo y precisión).
Ahora, más de cuatro décadas después, Tlalpujahua exporta a distintos países del mundo como: Estados Unidos, Canadá, Holanda, Inglaterra y hasta Singapur. 26 millones de esferas son destinadas a las distintas partes del mundo donde se consumen los adornos característicos de la navidad.
“La Casa de Santa Claus” es la fábrica principal del pueblo que en su momento llegó a emplear a más de 2 mil personas, ahora, a raíz del éxito de la fabricación de esferas, se fueron montando más de 180 talleres.
Agradecemos Turismo del Estado de Michoacán
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