Filomeluna: muñecas hechas con fibras naturales que duran toda la vida
¿Habías escuchado hablar de Filomeluna y sus muñecas hechas con fibras naturales? Creadas por Marlene Parra, estas muñecas recuperan las tradiciones artesanales al mismo tiempo que despiertan respeto hacia el medio ambiente. Los materiales naturales que usa la diseñadora mexicana para su fabricación convierten a estos juguetes en objetos duraderos e incluso en objetos de colección. Aquí te cuento más sobre ellos, por si uno de estos días en tu agenda aparece un cumpleaños u otra fecha especial.
Diseños para respetar y admirar la naturaleza
Maple es una pequeña muñeca con cuerpo de lino y algodón. Tiene orejas en forma de hojas, brazos que se mueven gracias a curiosas articulaciones hechas con botones de madera y un cabello bordado con estambre. Maple salió de un bosque, uno imaginario que solo Marlene Parra comprende y al que recurre cuando se trata de trazar patrones inspirados en la naturaleza y que dan vida a varias figuras.
Entre los diseños de Marlene podemos encontrar gatos, venados, unicornios, elefantes y mujeres-medicina. Estas últimas son muñecas que rinden un homenaje a esas mujeres que a lo largo de la historia han compartido su conocimiento y amor por las plantas, las estrellas, las ceremonias y nuestros animales; mujeres que ayudan a otros a conectarse con su ser interior y mostrar el camino de la curación.
El amor de Marlene hacia todo lo que nos rodea la hace pensar en estos personajes, pero también la lleva a recolectar fibras naturales como lana, algodón, lino, fieltro de lana, alpaca e hilados de mohair para confeccionar cada pieza. Su proceso tiene que ver con reconectarse con lo natural.
“No quería hacer cualquier muñeca –explica la diseñadora egresada de la Escuela de Diseño del INBA–; por eso busqué que encima de estar hechos de materiales amigables con el medio ambiente tuvieran una referencia a la Madre Tierra. El resultado son estos diseños bucólicos que evocan siempre respeto y admiración por la naturaleza”.
Tocar fibras sensibles
Marlene no siempre fue fanática de las muñecas, al menos no de las famosas Barbie. De niña –recuerda– ella era más de pistas y carros, le gustaba usar los juguetes de su hermano. Pero sus gustos cambiaron cuando conoció las muñecas de trapo otomíes.
“Mi hermana tenía una de estas muñecas, ¡era gigante! Yo la envidiaba porque quería una igual. Pero en ese entonces, no bastaba con desear un juguete para tenerlo; a veces pienso que quizá es por eso que ahora hago tantas”, sonríe.
Los juguetes están al servicio de la imaginación, pero también al de la memoria. Marlene se dio cuenta de que una muñeca puede convertirse en un objeto que hace un nexo muy fuerte con la persona, puede ser un niño o un adulto. También sabe que en un mundo en el que casi todo está hecho en serie, crear cada muñeca de manera única y rescatar el trabajo artesanal hace que sea especial para quien la tenga en sus manos.
Las creaciones de esta diseñadora, al igual que la muñeca otomí y otros juguetes tradicionales mexicanos fabricados con materiales duraderos, además de horas de entretenimiento, prometen algo único: atesorar momentos.
“Las personas cuando quieren regalar algo especial buscan objetos como estos, porque saben que no pasan de moda. Incluso te hacen recordar a la persona que te la dio o pensar en otros momentos agradables”, comenta la diseñadora, quien precisamente comenzó a hacer estas muñecas para regalárselas a sus sobrinos.
“Quería darles algo especial, de ahí decidí crear mis propios moldes para hacer las muñecas. Fue así como entendí que un juguete toca esas fibras de los recuerdos que son algo que puedes guardar durante mucho tiempo”.
Más sobre las muñecas hechas con fibras naturales
Filomeluna nació en Bélgica. Marlene vivía allá y fue, luego de que llegara a sus manos un libro sobre muñecas hechas con fibras naturales, que decidió emprender un negocio que combinara su profesión y, claro, sus raíces mexicanas.
Por eso, si ahora quieres ver el catálogo de muñecas lo encontrarás en inglés. Pronto eso cambiará, porque Marlene ya se mudó a la ciudad de México y lo está tropicalizando.
Mientras termina, puedes checar su trabajo en redes sociales:
Facebook: filomeluna
Instagram: @filomeluna
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