Herederos de las antiguas tradiciones de la cocina inglesa, los pastes, una especie de empanada rellena de papa o poro, de acuerdo con la receta original, son el platillo que le da identidad a esta zona de la república.
Llegaron a nuestro país por medio de los mineros ingleses que trabajaron en la región durante el siglo XIX, los llamaban ‘pastys’, eran una especie de empanada diseñada especialmente para ellos ya que su pequeño tamaño y los ingredientes (carne de res, papa, cebolla y masa preparada con trigo) lo hacían un alimento completo y fácil de comer sin utensilios.
Se diferencia de la empanada tradicional, además del sabor, por la trenza que se forma a un costado y que fue pensada para que los mineros pudieran tomarla de ahí y no ensuciar el alimento. Otra característica que difiere de la original receta inglesa es que los ingredientes son cocinados dentro de la masa, no están preparados previamente. Esto hace que su contenido se mantenga caliente por varias horas, lo cual era conveniente para los mineros que debían esperar para comer.
Por toda la zona es muy fácil encontrar pastes, sobre todo en Real del Monte, pero son pocos los que conservan la receta original, aun así cualquiera puede ser buena opción.
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