Baltra fue creado por el mismo equipo que los bares Limantour en la Ciudad de México conformado por varios socios y Grupo Sicario. Ellos son precursores de la existencia de atractivos cocktail bars y speakeasies en México. Gracias a su pasión por el tema de la coctelería y su constante renovación existen más opciones en la urbe.

Charles Darwin fue un hombre revolucionario que viajó con fines de exploración científica al archipiélago de Galápagos en el siglo XIX. En esa formación geológica, con alrededor de cinco millones de años de antigüedad, se encuentra Baltra, una de sus islas, y a la que debe su nombre este bar en la Condesa.

Bartenders como José Luis León, Adrián Borgaro, Ricardo Nava y creativos como Rodrigo Maceda, trabajaron juntos para ver nacer a Baltra. El espacio es muy acogedor. Los buenos tragos son la parte central de la experiencia.

No encontrarás Perla Negra y Paloma pues su propuesta se acerca más a los clásicos y a los que tienen más volumen alcohólico, elaborados con licores y destilados de todo el mundo.

Coctelería especializada en Baltra

En Baltra ofrecen ocho cocteles por temporada de cuatro meses. Cada 15 días tendrán cuatro tragos nuevos que anotarán en su pizarra para que elijas. Las opciones por probar son emocionantes pues en su barra hay vodkas elaborados con papa, semillas de uva, trigos de invierno o el delicioso vodka del bisonte; ginebras selectas como el Bombay Ambar, Monkey 47 y Tanqueray 10; y tequilas artesanales de regiones diversas, como las etiquetas Calle 23 y Calle 8.

Te recomiendo que pruebes el coctel Lavándula, uno de mis favoritos. Tiene Cynar, un licor amargo de alcachofa muy peculiar, limón amarillo, lavanda y un straight bourbon llamado Buffalo Trace. Es una mezcla intensa, herbal, ligeramente ácida y amarga al final, nunca empalagosa y muy refrescante. Adrián Borgaro fue mi bartender la primera noche en la que visité este local. Él fue el guía de viaje coctelero para ir probando y conociendo más.

Otro que demuestra el uso de técnicas cocteleras es el Très bon tiki. Se utiliza Fat wash; es decir, el uso de una base grasa que aporta cuerpo y sabor al trago al mezclarse con los alcoholes. En este caso, esta bebida lleva orgeat, una leche de almendras natural elaborada en el bar, mezclada con Cointreau (licor de naranja), cachaza y limón amarillo. El resultado es delicioso.

El Viejo George (sí, esa tortuga de la isla Santa Cruz en Galápagos que era único espécimen y murió para luego exhibirse en Nueva York) es un coctel sour con tequila, pepino, cardamomo, clara de huevo albahaca y anís.

Ambiente íntimo en Baltra

Para comer, te ofrecen semillas con sales y salsas de la casa si sólo quieres “picar”. Hay tortitas de barbacoa con aguacate para los carnívoros o un aguachile de tofu para los vegetarianos.

Frank Sinatra, Nina Simone, John Coltrane y Ray Charles son parte de las canciones de su actual soundtrack. La luz tenue y dorada logra una atmósfera sofisticada y relajante que invita a la charla entre sorbo y sorbo. El espacio es íntimo y cálido. Caben 35 personas en salón, nueve en la mesa exterior y próximamente habrá un patio con terraza privada.

Así como Darwin encargó a John Gould la meticulosa tarea de plasmar todos los animales, plantas y flores que estudiaba en esa desconocida y fascinante región, en Baltra se buscó que la decoración fuera ad hoc con el tema. Hay un cuadro con peces diferentes muy al estilo de las ilustraciones de aquella época en la que se publicó El Origen de las especies, un cuadro con mariposas disecadas, un huevo de Avestruz, cuerdas de navíos y más objetos vintage que encantan a esos amantes del tema viajero.

Baltra como inspiración

A Darwin lo motivó conocer un mundo más allá del que sus ojos veían. Desafío los conocimientos y creencias de aquella época. Fue precursor de los viajes científicos en el siglo XIX y emprendió en el Beagle una travesía que aún hoy sigue teniendo repercusiones en la ciencia.

Como él, el mundo de la coctelería en la Ciudad de México ha emprendido una travesía desde hace al menos seis años en un contexto en el que hay más valoración por recetas clásicas, una búsqueda de ampliar la gama de sabores conocidos y una evolución para crear recetas originales con balance.

Que existan opciones más allá de las gomichelas o las margaritas es valioso, así que anímate a viajar por estas bebidas. No necesitas ser experto, sólo tener mente abierta para probar y disfrutar.

¿Dónde está Baltra?

Baltra se localiza en Iztaccíhuatl 36 D en la colonia Hipódromo Condesa. Sus horarios son domingo a martes de 18:00 a 00:00 horas y de miércoles a sábado de 18:00 a 02:00 horas.

Más información:

Facebook: baltrabar

Agracemos a José Luis León y Adrián Borgaro su apoyo para esta reseña.

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