¿Qué panaderías tradicionales del Centro Histórico de la Ciudad de México conoces? Caminar por esta zona es siempre es un placer. Las historias siguen contándose en sus calles y recintos a través del tiempo. A pesar de ser un sitio que muchos evitan, pues ahí converge lo multifacético de la realidad política y social mexicana, el paseo es disfrutable.
Raúl Traslosheros de la Fundación Herdez guió un recorrido por algunas con el fin de mostrar la riqueza de estos sitios que han llenado de sabor muchos hogares mexicanos a través de varias generaciones.
Durante el recorrido se hicieron algunas paradas en sitios que nadie debe perderse como la Churrería “El Moro”, donde se hizo escala para disfrutar de un churro acompañado con una taza con chocolate mexicano, y la tienda de mazapanes Toledo.
Panaderías tradicionales del Centro Histórico de la Ciudad de México
Además de contar datos sobre el pan dulce en México, compartió esta ruta para conocer más sobre espacios tradicionales que forman parte de una historia escrita con harina.
Bisquets de Obregón
Este sitio data de 1945 y era conocido como La Perla de Oriente, que abrió su primera sucursal en la calle de Álvaro Obregón No. 60. Posteriormente se transformó en franquicia, tanto en esta ciudad como en varios estados de la República Mexicana.
No dejes de probar: bísquets, taco de piña, ochos, búhos y astorga con un café con leche, mejor conocido como “lechero”.
Tacuba 85, Local 2, colonia Centro
Panificadora La Vasconia
Fue fundada en 1870 por españoles. Cuenta con rosticería, cafetería, galletas, panadería y pastelería. Guillermo Hernández, encargado del lugar, mostró las áreas de trabajo de este sitio en el que todo se hace de manera artesanal. Aquí se llegan a fabricar hasta 23 kilos de galletas diariamente.
No dejes de probar: semáforos (pan elaborado con la misma harina del bisquet), flor, calabaza, choux y cocoles.
Tacuba 73, colonia Centro
Pan Segura
Un imperdible expendio con pan tradicional de Jalisco al que no llegas si no eres un conocedor de la zona o del tema. Sin duda, una joya en cuyo estrecho pasillo se exhiben vitrinas con variedades que no se ven con facilidad en la ciudad -y de sabor excepcional, que se llevó las palmas respecto a todas las demás-.
No dejes de probar: galletas de maíz, galletas de café, soletas, buñuelos, roscas de canela, polvorones de cacahuate y marquesotes.
Avenida 16 de Septiembre 72, colonia Centro
Pastelería Madrid
Abrió sus puertas en 1939 y es otra de las más reconocidas. Destaca su zona de comida, cafetería y su extensa variedad de pan salado o dulce y pasteles. integra en su menú desde bolillos, pan de salvado o de centeno, pastel de tres leches y algunas tartas más contemporáneas.
No dejes de probar: panqué de nuez, tarta de higo, conchas y cemitas.
5 de Febrero No. 25, Colonia Centro
Pastelería El Globo
Esta empresa se fundó en 1884 y por ese motivo se incluyó en el paseo. Hoy en día es parte de un gran grupo del ramo con 250 puntos de ventay una amplia cadena de producción.
Avenida 16 de Septiembre 14, colonia Centro
Pastelerías El Molino
En 1918, Juan Servitje, patentó la “higiénica múltiple póo”, la primera máquina mexicana para hacer bolillos y fue hasta 1928 que abrieron este espacio. En años recientes, también pasó a manos de una corporación de mayor escala y cuenta con diversas sucursales.
Avenida 16 de Septiembre No. 59, Colonia Centro
Pastelería Ideal
Otra de las más emblemáticas que data de 1927. Inició operaciones con el nombre de Ideal Bakery. La gente acude por montones -sin exagerar- a comprar pan para la reventa pues es un auténtico almacén de panes, pasteles, bocadillos, postres y gelatinas.
Incluso, en el segundo piso se encuentra su zona de exhibición que es conocida como Museo del Pastel y es un muestrario vivo de pasteles para bautizos, XV años bodas y cumpleaños de muchos kilos y pisos, que van desde lo tradicional hasta lo kitsch.
No dejes de probar: garibaldis, mantecadas y gelatinas.
República de Uruguay 74, colonia Centro
La Pilarica
Ahora conocido como Karsapan, ofrece pan dulce y salado, así como pasteles y gelatinas. Destacan por sus panes de muerto -con variantes como higo, nuez o relleno de crema- y roscas de reyes. Hay algunos que no verás en ningún otro sitio y, aunque el trato de su personal es hostil si te ven con una cámara, conviene ir por piezas para disfrutar ese antojo goloso que da de vez en vez -o casi siempre-.
No dejes de probar: trenza de nuez, orejas, ojo de pancha o de buey cubierto con pepita y conchas.
López 77, colonia Centro
Así, concluyó un paseo por la panaderías tradicionales del Centro Histórico de la Ciudad de México con el que una vez más se comprueba que el país está lleno de sabores por descubrir y que no sólo te llenarán de gusto el paladar y el estómago, sino que te harán aprender más sobre la historia y los cambios que ha tenido la cultura a través del tiempo.
Agradecemos a Fundación Herdez su apoyo para este texto.
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