Ante la pregunta acerca de cuánto debe comer un niño, Ximena nos platica que eso depende de cada niño y los niveles de nutrición de sus células. Hay niños que comen mucho pero no absorben los nutrientes (por eso están obesos) y hay niños flaquitos pero bien nutridos.
Si tuviéramos que hacer un estándar de medidas para compartir, ella nos habla de cinco comidas al día, de las cuales tres son fuertes con macronutrientes y micronutrientes. También nos comenta que la porción de proteína de esas tres comidas debe ser del tamaño de la palma de la mano del niño, los carbohidratos del tamaño del puño y dar vía libre con las verduras. Para las colaciones serán mejor las frutas, más verduras y algunos cereales o frutas secas.
¿Qué debe comer un niño según el tipo de actividad de realice?
Ximena nos comparte una serie de menús que pueden activar ciertas características en tus niños, por ejemplo:
Desayunos para activar sus neuronas: un día de exámenes o un día de muchas clases, el niño debe comer como primera ingesta su ración de proteínas. ¿Qué? Un huevo con alguna verdura es ideal. Cuando se termine el huevo, se complementa con alguna fruta o un jugo.
Refrigerios para dar soporte a mucha actividad física: en esos días de excursión o competencias físicas es bueno aumentar los carbohidratos por medio de cereales, por ejemplo: bastones de zanahoria con cuadros de queso y jamón con tostadas y una fruta completarían un desayuno energético. También se puede cambiar la tostada por un par de rebanadas de pan de caja y hacer un sándwich.
Cuando salimos de vacaciones los niños enfrentarán situaciones que los pueden enfermar, hablamos de cambios de temperatura, alimentos que desconocen o que no están preparados en casa. Para enfrentar estas situaciones es bueno aumentar con anticipación la cantidad de micronutrientes, estos reforzarán el sistema inmunológico de los niños.
Solo nos menciona tres puntos importantes con respecto a los suplementos alimenticios:
- Si tienes duda o no son recetados por el doctor; debes hacer una biometría hemática para saber si a tu hijo le faltan nutrientes; de ser así se usarán solo los que son para niños.
- No se deben usar por temporadas largas, se recomienda que sean un mes sí y uno no.
- Sobrevitaminar puede ser contraproducente en el sistema inmunológico a largo plazo.
Agradecemos a Ximena Díaz Reina, psicóloga clínica certificada en psicología transpersonal, constelaciones familiares, psicoterapia corporal creadora del programa de nutrición con apoyo psicoterapéutico.
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