Salud

Errores comunes al adoptar un estilo de vida saludable y como corregirlos

Errores comunes al adoptar un estilo de vida saludable y como corregirlos
  • Publicado15 septiembre, 2015

 

Hay una delgada línea entre comer sano y la ortorexia, entre adoptar una forma de vida saludable y dañar tu cuerpo. Hay quienes creen que comer productos ligth es alimentar, cuando lo único que hacen es engañar con químicos una parte del cerebro, que además no aportan ningún nutriente.

Ante éste y otra serie hábitos “saludablemente engañosos” Brenda García Health Coach nos orienta para tomar mejores decisiones al adoptar un estilo de vida sana, cuidado con:

  1. Medir tu peso diario

El peso no es determinante para saber si una persona es saludable o no. Depender de un número frío no te va ayudar a llegar a una composición corporal saludable; más que un peso bajo, debes buscar el equilibrio entre masa muscular y el índice de grasa en tu cuerpo.

Cómo hacerlo bien:

Cuando llevas una alimentación equilibrada y realizas ejercicio, tu cuerpo, como consecuencia, tendrá menos grasa y más masa muscular. Lo que te ayudará a tener un control es hacer la medición de estos factores. Comenta Brenda: “tener un buen nivel muscular agiliza el metabolismo basal, lo que también ayuda a la quema de calorías grasas”.

  1. Creer que la comida saludable no tiene límite de consumo

Hay alimentos que son saludables que nos han vendido como indispensables en cualquier dieta, y sí, debemos aceptar que tienen un gran aporte proteínico, pero hay veces que su exceso las convierte en alimentos que te harán ganar peso.

Cómo hacerlo bien:

Come lo que requieras, pero evita el exceso, Brenda nos comparte un ejemplo: las semillas de cacahuate son muy saludables, tienen un gran contenido proteico y de  omega 3; sin embargo si ingieres un bote entero de crema de cacahuate, dejará de ser saludable: hay que tener en cuenta que una sola cucharada tiene casi 90 kilocalorías.

  1. Convertir en una obsesión la forma de alimentarte

Esta obsesión tiene un nombre: la ortorexia. Brenda menciona: “Parte de ser saludable es ser integral” Se refiere a que la unión de muchos buenos hábitos, resulta en un cúmulo de beneficios a la larga. Dejar de alimentarte de un día para otro puede ser contraproducente.

Cómo hacerlo bien:

Parte de estar saludable es disfrutar de la vida con moderación y eso incluye alimentarte a consciencia, sin extremos. Brenda recomienda eliminar los alimentos que no te aportan: los refinados, químicos, grasas saturadas, etcétera. A su vez invita a consumir las versiones saludables, algo como liberarte de los procesados y comer “limpio” de químicos. Empieza dando pequeños pasos y lograrás que poco a poco se convierta en un hábito lleno de beneficios.

  1. Contar calorías de todo lo que comes

Contar calorías todo el tiempo es un exceso poco saludable. Enfocarte en eso puede distorsionar la idea de lo que consumes. Ejemplo: te tomas un refresco de cola con cero calorías, pero el impacto en tu salud es distinto al de tomar un jugo verde con 180 kilocalorías.

Cómo hacerlo bien:

Mejor cuenta los nutrientes que le ofreces a tu organismo. El cuerpo fue creado para digerir vegetales, leguminosas y lo que naturalmente está destinado a nutrirlo. Los procesados o químicos son solo substancias que activan partes de tu cerebro a las que mandan señales de saciedad o dulzor, pero no aportan y al contrario alteran los procesos naturales del cuerpo.

  1. Ejercicio excesivo y mala alimentación

Hacer ejercicio en exceso y no alimentarte en cantidades suficientes no te hace saludable, al contrario es un grave error. Esto es porque no tienes la suficiente glucosa, y no hay qué dé energía al cuerpo, como consecuencia los músculos se absorben en sí mismos, atacando la masa muscular y a eso se le llama catabolizar. También hacer ejercicio sin alimentarte hace que tus defensas bajen y la absorción de nutrientes sea cada vez más lenta.

Cómo hacerlo bien

“Las abdominales se hacen en la cocina” comenta Brenda y explica que un cuerpo sano se construye el 80% por alimentación y el 20 % por ejercicio. Esto se traduce en que estar en buena forma física depende más de lo que comes que de lo que ejercitas. Dice también: “Mi recomendación es combinar una buena dieta con ejercicio al menos tres veces por semana”.

Agradecemos a Brenda García Health Coach y creadora de Santai, relax and health spa las facilidades para este artículo.

 

Autor

Escrito por:
Lucía Velázquez

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