Mitos sobre el tratamiento médico de la depresión
La depresión como enfermedad, hoy en día es tratable y requiere un abordaje integral con medicamentos y terapia; el impacto de este tratamiento se refleja de manera drástica en la calidad de vida del paciente y muchas veces en la solución de otra serie de problemas de salud que habían estado presentes en su vida.
Existen una gran cantidad de mitos relacionados con la depresión, la mayor parte de las veces son infundados y afectan la percepción de las personas con respecto a su padecimiento y los tratamientos disponibles, generan estigma y evitan que las personas tengan un seguimiento adecuado de su tratamiento, empeorando su estado de salud.
El doctor Alan Barrell, director médico de Lundbeck México nos comparte cuáles son algunos de los mitos y su realidad.
Mito: La depresión es una debilidad mental, basta con pensar positivo para que desaparezca.
Realidad: El trastorno depresivo mayor es una enfermedad al igual que la hipertensión arterial o la diabetes, donde existe una alteración en el funcionamiento normal del cerebro, por lo que pedirle a una persona deprimida que “piense positivo” es como pedirle a un diabético que deje de serlo.
Mito: Los antidepresivos son una “salida rápida” porque solo te hacen olvidar los problemas, no los solucionan.
Realidad: El tratamiento farmacológico para la depresión está enfocado en mejorar el estado de ánimo de manera directa, sin que esto signifique que los problemas simplemente desaparecen, sino que al disminuir los síntomas depresivos es más fácil poder enfrentar los problemas de la vida cotidiana y tener una perspectiva más clara de las cosas.
Mito: Los medicamentos para la depresión son adictivos.
Realidad: Ningún antidepresivo genera adicción, aunque de suspenderse de manera abrupta en algunos casos podría confundirse con el “efecto de rebote”, o la reaparición de los síntomas depresivos. Cabe mencionar que algunos medicamentos para tratar la ansiedad pueden generar adicción, esta se presentaría por un mal uso del medicamento y no simplemente por tomarlo bajo indicación médica.
Mito: Los antidepresivos deben tomarse toda la vida.
Realidad: El tiempo necesario para lograr un tratamiento antidepresivo eficaz varía por lo general entre 6 meses y 1 año dependiendo de la severidad de los síntomas y la respuesta al tratamiento, esto porque una vez que la persona se siente bien se necesita un periodo de mantenimiento a fin de asegurar la curación, pero nunca se tomarán por toda la vida.
Mito: Los antidepresivos causan efectos secundarios.
Realidad: Como todos los medicamentos, los antidepresivos no están exentos de presentar efectos secundarios, reacciones adversas e interacciones con otros medicamentos. Si deseas informarte de los efectos secundarios más frecuentes consulta directamente a tu médico al momento de la prescripción.
El doctor concluye con “esta es una enfermedad real que si se descuida afectará a muchas personas. Se contempla que para el año 2030 será la causa número uno de incapacidad en personas en edades productivas. Por ello no debemos olvidar que tiene tratamiento.
Agradecemos al doctor Alan Barrell, director Médico de Lundbeck México las facilidades para esta edición.